Su arquitectura de puente colgante con seis cuerpos, su longitud y su cercanía con la carretera lo convierten en un lugar ferroviario atractivo de observar.
En Agosto de 1897
El Puente del Toltén debió hacerse “sobre fundaciones tubulares por
medio de aire comprimido”. Será una de las obras de Arte más grandiosas
de Chile. Tendrá 450 metros de largo con 9 tramos metálicos de 50
metros cada uno, reposando sobre dos estribos y ocho pilares a
machones.
Desgraciadamente, espacio no nos permite ahondar en la construcción misma, diremos sólo que el tramo de la línea férrea de Temuco a Pitrufquén pasa a ocupar un lugar secundario, lo verdaderamente importante de la empresa está en el Puente Toltén, es un desafío, llegan ingenieros de distintos a presenciar la obra...
Como último relato de las faenas mismas, diremos que cuando se realizaba la recepción del segundo tubo del quinto pilar, el último de todos, se produjo una escena que pudo terminar con la vida del Ingeniero, su ayudante de apellido Cuevas y un obrero:
Bajaron al fondo del pozo para comprobar la solidez. Equivocadamente cuando aún estaban en el fondo, el agua surgió de los bordes del tubo. Se habría dejado de inyectar aire, y se había abierto las llaves. Fue un momento de pánico, la profundidad del río en este lugar era de 5 metros y el tubo estaba enterrado 6 metros bajo el suelo. Se iban a ahogar bajo 11 metros de agua.
Todos se dirigieron a una cuerda para subir, Verniory los toma del cuello y les grita, primero el Sr. Cuevas - El tiene mujer y niños — el obrero gritaba - Yo también tengo mujer y niños. Cuando el ”Jefe” como cariñosamente le llamaban fue sacado, ya el agua sobrepasaba sus hombros.
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